¡Hola! Soy la Barbie irlandesa. Visitemos Irlanda, la hermosa tierra de la buena suerte, los lagos y Blarney.
Si pudieras volar sobre Irlanda, lo más seguro es que disfrutarías con la visión de los verdes prados y las interminables colinas. Entre el verdor irlandés se encuentran los brillantes y azules lagos (loughs, en gaélico), salpicados por la presencia de pequeños barcos pesqueros llamados currachs, y es que la pesca es muy popular en Irlanda.
Y si miraras con muchísima atención, podrías ver algún hada oculta tras un árbol o retozando en los bosques. Nosotros, los irlandeses, siempre hemos creído en la existencia de las hadas (llamadas sidh) y los duendes, siendo el leprechaum (zapatero de las hadas) el más conocido de todos. Se cuenta que si logras pillarlo y lo miras fijamente -¡sin pestañear una sola vez!-, el leprechaum te dará de inmediato todo su oro.
La piedra Blarney o piedra de la elocuencia, un monumento irlandés famoso en todo el mundo, forma parte del castillo con el mismo nombre. Según la leyenda, si besas la piedra, estarás lleno de labia (¡es decir, que te convertirás en un parlanchín!).
¿Y qué se supone que hacemos en Irlanda para divertirnos? Bueno, los irlandeses somos famosos por nuestros juegos tradicionales como el fútbol gaélico (un cruce entre rugby y fútbol americano) y nuestro deporte nacional llamado hurling (un antiguo juego irlandés que se parece al hockey).
También contamos con una rica historia de música y danza. Nos encanta ir al ceildhe o ceili, que es una reunión musical donde se interpretan bailes tradicionales irlandeses llamados jigs y reels. También hay otra actividad tradicional que espero que nunca deje de llevarse a cabo: el arte de contar cuentos. El seanachai, o cuentacuentos irlandés, siempre tiene un gran suministro de historias para entretenernos durante horas y horas.
A los irlandeses también nos encanta comer. Carne de ternera, de oveja, de cerdo, jamón... Y, por supuesto, somos famosos por nuestras patatas y coles.
Luzco un vestido tradicional irlandés con adornos de encaje, a juego con mi gorro. ¡Y mirad mi collar! Nunca salgo de casa sin llevar mi trébol de la suerte.
Espero que vengáis a Irlanda algún día. ¡Pero hasta entonces, que la suerte de los irlandeses os acompañe siempre! ¡Adiós!
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Año: 1995
Código: 12998
Molde de cara: Superstar
Foto del prototipo:
