La antigua isla de Japón es conocida como el país del sol naciente. La princesa de Japón recibe al temprano sol de primavera con su negro y brillante cabello y sus ojos reluciendo con entusiasmo.
La primavera ha llegado al fin, y los bonitos sakura (cerezos en flor) han alcanzado la plenitud. Hoy habrá hanami, o lo que es lo mismo, la tradición anual japonesa de observar la belleza de las flores. En todo Japón hay fiestas en honor de estas delicadas flores. La princesa se sienta bajo los árboles y escribe haiku (poesía tradicional), también en honor de las flores de cerezo.
Además del haiku, la hermosa joven practica otras maravillosas artes japonesas. Disfruta mucho estudiando cha-no-yu, que es el arte de la ceremonia del té. En días señalados, la princesa contempla actuaciones de bunraku (teatro tradicional de marionetas). También se entretiene practicando ikebana, o arte de arreglos florales. Cada una de estas modalidades enfatizan el equilibrio, la armonía y las formas.
Para el hanami, la princesa viste el vestido típico japonés conocido como kimono, aunque con lo que realmente sueña es con ponerse un vestido espectacular el día de su boda. Para dicha ceremonia lucirá un exquisito juni-hitoe, que significa "doce kimonos". Estre vestido tradicional compuesto de doce capas consta asimismo de una larga cola y de un obi en su cintura que sujeta todo el conjunto.
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Año: 2003
Código: B5731
Molde de cara: Lea
Foto del prototipo: